El primer ministro Scott Morrison ha presentado una tercera serie de sanciones contra Rusia y anunció la distribución de equipos militares no letales a Ucrania tras la invasión del país.
Australia se ha comprometido a enviar suministros médicos, apoyo financiero y equipos militares, pero no enviará armas a Ucrania.
"Esa es la forma más efectiva que Australia tiene para ayudar”, dijo Morrison.
"Estamos muy lejos de Ucrania y la forma más efectiva de hacerlo es a través de nuestros socios de la OTAN".
Morrison agregó que Australia enviaría apoyo financiero a Ucrania a través de la OTAN.
El gobierno ha descartado enviar tropas para unirse a la guerra.
“Trabajaremos con nuestros socios para mantener una ola continua de sanciones y seguir aumentando la presión sobre Rusia”, declaró Morrison durante una conferencia de prensa el viernes por la mañana.
Las nuevas sanciones impuestas por Australia son similares a las de Estados Unidos y el Reino Unido, y se aplicarán a los miembros del parlamento ruso que votaron para autorizar la acción militar, así como a los oligarcas del país.
El primer ministro dijo que Australia trabajaría con las autoridades estadounidenses para alinear las sanciones contra los bielorrusos que están involucrados en la ofensiva rusa.
"Rusia ha estado planeando estos actos de violencia desde hace bastante tiempo, pero debe haber un costo, debe haber un precio y debe ser impuesto por la comunidad global", dijo Morrison a los periodistas en Adelaide.
Morrison también criticó a China por haber aliviado las restricciones comerciales con Rusia durante este período de tensión.
"En particular, me preocupa la falta de una respuesta firme por parte de China", dijo Morrison.
Agregó que "de la noche a la mañana... y en un momento en que el mundo está imponiendo sanciones adicionales a Rusia... (el diario) South China Morning Post, publicó que (China) ha aliviado las restricciones al comercio (con Rusia)."
Mientras varios líderes mundiales condenaron la invasión que el presidente de Rusia, Vladimir Putin, lanzó contra Ucrania, el ministro de exteriores chino, Wang Yi, dijo a su homólogo de Moscú que su país "comprende las preocupaciones razonables de Rusia en materia de seguridad", según una transcripción de la conversación telefónica publicada en Pekín.
El ministerio de Relaciones Exteriores declinó referirse al ataque como una "invasión" durante una rueda de prensa el jueves.
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