El primer ministro australiano, Scott Morrison, viajará el miércoles a Darwin, capital del Territorio del Norte, para anunciar un paquete de ayuda de $ 747 millones, asignado a lo largo cinco años, para mejorar la infraestructura de las bases militares en el extremo norte del país.
Las cuatro bases militares que recibirán los fondos son utilizadas por las Fuerzas de Defensa de Australia y el Cuerpo de Marines de Estados Unidos ubicados en el Territorio del Norte.
"Nuestro trabajo con Estados Unidos, con nuestros aliados y vecinos de la región Indo-Pacífico, tiene como objetivo continuar promoviendo los intereses de Australia, invirtiendo en las Fuerzas de Defensa de Australia, particularmente en el norte de Australia", dijo Morrison en un comunicado, publicado por el diario The Australian.
"Nuestro enfoque está en la búsqueda de la paz, la estabilidad y la libertad y la apertura de la región Indo-Pacífico, con un orden mundial que favorezca la libertad", enfatizó el mandatario.
Las bases que recibirán fondos incluyen los campos de entrenamiento militar, Robertson Barracks Close, Kangaroo Flats, Mount Bundey y Bradshaw Field.
Los fondos son parte de un presupuesto total de $ 2 mil millones entre Australia y Estados Unidos , que se creó con el fin de realizar obras de infraestructura para actualizar las instalaciones en las bases de las Fuerzas de Defensa de Australia en el Territorio del Norte.
Los proyectos de infraestructura, que se espera que se completen en 2026, permitirán a las tropas australianas realizar simulacros de guerra basados en la realidad y ejercicios de entrenamiento militar con los principales aliados, especialmente Estados Unidos.
Altas tensiones entre Australia y China
El anuncio se produce días después de que el ministro de Defensa, Peter Dutton, dijera que la guerra con China por el tema de Taiwán no debería "descartarse", y el secretario de Asuntos Internos, Michael Pezzullo, usó su mensaje del Día de Anzac para advertir que los "tambores de guerra" estaban sonando cada vez más fuertes.
El mensaje de Pezzullo, que se publicó el domingo pero que comenzó a aparecer en los titulares el martes, provocó críticas por parte del Partido Laborista y de los Verdes.
El exlíder laborista Bill Shorten describió el mensaje de Pezzullo como un discurso con "un lenguaje hiper excitado" y dijo que "no estaba seguro si nuestros funcionarios públicos de alto rango deberían usar lenguaje que pueda “causar más ansiedad".
Por su parte el líder de los Verdes, Adam Bandt, dijo que la "postura agresiva de Dutton contra China nos pone a todos en riesgo".
"No podemos guardar silencio sobre los abusos de los derechos humanos de ningún gobierno, incluido el gobierno chino, pero eso no significa que hay que prepararse para una guerra", escribió Bandt en Twitter.
“La guerra es el peor resultado posible para resolver la tensión geopolítica y poner fin a los abusos contra los derechos humanos.
“Dutton acaba de ser asignado a su rol y claramente quiere probarse con mano dura, pero esto demuestra por qué él fue la opción incorrecta para el cargo de ministro de Defensa.
“En lugar de mantener mentes frías y estratégicas, tenemos personas dispuestas a inflamar las tensiones ", añadió Bandt.
Otras noticias en español:
Dos nuevas muertes de indígenas australianos bajo custodia elevan a siete los fallecidos desde marzo
