Cientos de manifestantes continuaron este martes con las protestas en contra del mandato que exige que todos los trabajadores de la construcción de Victoria estén vacunados -al menos con una dosis- antes del 23 de septiembre y para rechazar la decisión repentina de cerrar la industria por dos semanas en Melbourne y en algunas ciudades de los alrededores.
Esta mañana la policía antidisturbios se preparó a lo largo de la ciudad para contener a la creciente multitud de manifestantes que partieron de la sede del sindicato de la construcción, pero que más tarde se dirigieron a la Casa del Parlamento.
Las autoridades habían instado a las personas a evitar la intersección de las calles Elizabeth y Victoria mientras cientos de manifestantes enmascarados y con el rostro descubierto se reunían frente al mercado Queen Victoria.
Puntos destacados:
- En respuesta a los disturbios del lunes, el gobierno de Victoria anunció el cierre de casi todos los sitios de construcción en varias áreas de Victoria, durante dos semanas.
- Los líderes sindicales acusan que "neonazis y extremistas de derecha" secuestraron el evento de ayer que termino en violentos disturbios.
- La ministra de la Industria en la oposición, Bridget Vallence, dijo que el gobierno de Andrews debe revertir de inmediato su "decisión de pánico" de cerrar la industria de la construcción.
La cadena de noticias ABC reportó que algunos manifestantes se identificaron como trabajadores de la construcción y miembros del sindicato de la Construcción, Silvicultura, Marítimo, Minería y Energía (CFMEU, por sus siglas en inglés) que se oponían a las vacunas obligatorias.
Cientos de manifestantes, incluidos activistas de extrema derecha, se manifestaron el lunes en Melbourne contra el mandato que exige que todos los trabajadores de la construcción de Victoria estén vacunados antes del 23 de septiembre.
Como consecuencia de estas protestas que se tornaron violentas, el gobierno de Victoria dio la orden de que la industria de la construcción de Melbourne y varias ciudades de los alrededores se cerrará durante dos semanas.
Solo la infraestructura crítica, incluidos los hospitales y las obras de pasos a desnivel en curso, continuarán operando durante el cierre.
El ministro de Relaciones Industriales, Tim Pallas, confirmó a última hora del lunes el cierre por dos semanas, a partir de las 11:59 pm, de los sitios de construcción del área metropolitana de Melbourne, la ciudad de Ballarat, la ciudad del Gran Geelong, el condado de Surf Coast y el de Mitchell.
"Hemos sido claros: si no se siguen las reglas, no dudaremos en tomar medidas. Hemos visto un incumplimiento generalizado en toda la industria y es por eso que estamos tomando las medidas necesarias para proteger a todos y cada uno de los victorianos", dijo en un comunicado.
"Advertimos a la industria hace apenas una semana, hemos visto un comportamiento espantoso en los sitios de construcción y en nuestras calles, y ahora estamos actuando con decisión y sin dudarlo".
El gobierno de Victoria advirtió que todos los sitios de construcción deberán demostrar el cumplimiento de las instrucciones del director de Salud antes de la reapertura, incluido el requisito de que los trabajadores muestren evidencia de haber recibido una dosis de la vacuna COVID-19 antes de regresar al trabajo el 5 de octubre.
Una "decisión de pánico", oposición
La ministra de la Industria en la oposición, Bridget Vallence, dijo que el gobierno de Daniel Andrews debe revertir de inmediato su "decisión de pánico" de cerrar la construcción.
"Los Liberales Nacionales condenan las violentas protestas, pero las acciones de unos pocos no deben usarse como excusa para cerrar una industria entera, dejando sin trabajo a decenas de miles de personas", dijo en un comunicado.
Funcionarios sindicales dicen que los manifestantes del lunes no eran en realidad miembros de CFMEU, sino "neonazis y extremistas de derecha" que secuestraron el evento.
La mayoría de los manifestantes que participaron en las protestas del lunes fueron desplazados por la policía que utilizó balas de goma y gas pimienta para controlar a la multitud enfurecida.
La protesta se intensificó cuando dos dirigentes sindicales, incluido el secretario de la rama de la construcción de Victoria, John Sekta, salieron de la oficina de Elizabeth Street para hablar con los manifestantes poco antes del mediodía.
Setka fue recibido con abucheos e insultos de la multitud, mientras algunos manifestantes arrojaban botellas.
CFMEU Victorian secretary John Sekta Source: AAP
"Por favor, cálmense. ¿Pueden al menos darme el respeto para hablar? No somos el enemigo, no sé lo que han escuchado", dijo a los manifestantes.
"Nunca he dicho que apoyo la vacunación obligatoria".
Una vez que el líder sindicalista se metió a las oficinas, los manifestantes rompieron una puerta de vidrio del edificio.
Los sitios de construcción han sido un lugar de alta propagación en el último brote, lo que obligó a los funcionarios de Salud a cerrar los comedores en estos sitios desde la semana pasada.
