Varios sectores que trabajan en el área de ayuda social han acogido con satisfacción las grandes inversiones anunciadas por el Gobierno en su presupuesto federal, en particular, el aumento de fondos para la atención al adulto mayor y el apoyo a las personas con discapacidades.
No obstante, otra parte del mismo sector ha acusado al Gobierno de abandonar a “demasiadas personas vulnerables” en este presupuesto.
Puntos destacados:
- Grupos que para trabajan en los servicios de la salud mental y cuidado de adultos mayores aplaudieron el incremento de fondos para ambos sectores.
- Las escuelas, hospitales, Medicare, salud mental, atención de ancianos y apoyo para personas con discapacidades recibieron más fondos.
- El Sindicato de Servicios de Salud (HSU) dijo que el incremento de fondos no arreglaría la situación crónica laboral de los cuidadores, terapeutas y personal de apoyo en ambos sectores.
El tesorero Josh Frydenberg entregó el presupuesto federal de 2021 el martes por la tarde con una hoja de ruta para la recuperación económica de Australia que incluye inversiones significativas en los sectores de atención al adulto mayor, salud mental y la discpacidad.
"Una economía fuerte nos permite garantizar los servicios esenciales de los que dependen los australianos", dijo el tesorero.
“En este presupuesto, el Gobierno está asignando niveles récord de gasto social para escuelas, hospitales, Medicare, salud mental, atención de ancianos y apoyo para personas con discapacidades”.
El sector de la atención al adulto mayor ha recibido una de las inversiones más importantes en respuesta al incisivo informe de la Comisión Real realizado tras una amplia y extendida investigación.
El Gobierno ha prometido $ 17,7 mil millones para reformar el sector que ha sido debilitado por la crisis de COVID-19 y los escándalos administrativos.
El Australian Council on the Aging acogió con beneplácito la inversión y dijo que era "la asignación de fondos más grande de toda una generación ".
El presidente de Lifeline Australia, John Brogden, dijo que era un "presupuesto extraordinario para la salud mental.
"Es una respuesta seria y significativa a la 'negligencia' del sector identificada por la investigación de la Comisión Real, y refleja la voluntad de transformar el sector ", dijo el director ejecutivo del consejo, Ian Yates.
Por el contrario, el Sindicato de Servicios de Salud (HSU) dijo que el incremento de fondos para el sector no arreglaría la "crisis crónica que existe desde hace años".
"Para los cuidadores, terapeutas y personal de apoyo no hay fondos para mejorar sus condiciones laborales o para asegurar un puesto de trabajo permanente y mejor remunerado", dijo el presidente nacional de HSU, Gerard Hayes.
En este presupuesto, el Gobierno está asignando niveles récord de gasto social, dijo el tesorero federal.
"Claramente, el plan del Gobierno es continuar explotando la buena voluntad de una fuerza laboral insegura y mal pagada compuesta mayormente de mujeres ".
La ayuda financiera para el sector de la salud mental es otra de las inversiones importantes del presupuesto federal. El Gobierno ha prometido invertir $ 2,3 mil millones para el sector de la salud mental y la prevención del suicidio y $ 13,2 mil millones en fondos adicionales para el Plan Nacional de Seguro por Discapacidad.
El presidente de Lifeline Australia, John Brogden, dijo que era un "presupuesto extraordinario para la salud mental".
El plan del Gobierno es continuar explotando la buena voluntad de una fuerza laboral insegura y mal pagada compuesta mayormente de mujeres, dijo el jefe del sindicato HSU.
Pero la respuesta a los detalles del presupuesto federal del Consejo Australiano de Servicios Sociales fue menos favorable. Por un lado, acogió con satisfacción los fondos anunciados para mejorar los servicios esenciales, pero por otra parte criticó al Gobierno por abandonar a los australianos vulnerables en su presupuesto.
"El presupuesto proporciona fondos esenciales para finalmente comenzar a reparar algunos de los grandes agujeros en nuestros servicios de atención a personas de la tercera edad, cuidado de niños, salud mental y violencia doméstica", afirmó la directora ejecutiva del consejo, Cassandra Goldie.
"El Gobierno ha otorgado alrededor de $ 20 mil millones de dólares en recortes en el impuesto sobre la renta para trabajadores remunerados para el próximo año fiscal, más decenas de miles de millones de dólares en incentivos fiscales comerciales.
"Pero ni un solo centavo más para las personas que viven en la pobreza extrema, incluidas las mujeres de bajos ingresos".
Por su parte, la organización benéfica Mission Australia criticó el paquete presupuestario por reflejar un "liderazgo decepcionante en la oferta de viviendas asequibles".
"La infraestructura esencial que se necesita para construir viviendas sociales ha sido ignorada una vez más mientras el Gobierno federal continúa invirtiendo en otro tipo de infraestructura.
“¿Dónde está el liderazgo y la innovación que necesitamos desesperadamente para realizar este proyecto”, dijo el director ejecutivo James Toomey.
"Si bien reconocemos que el Gobierno se ha comprometido a invertir en iniciativas para ayudar a las personas a comprar una vivienda, incluido asistir a los progenitores solteros a través del plan Garantía de Vivienda Familiar (Family Home Guarantee), estas medidas no van lo suficientemente lejos para abordar los graves problemas estructurales del sector que incluyen a las personas sin hogar en este país".
Adrian Pisarski de la organización National Shelter, un grupo que aboga por la vivienda para personas de bajos ingresos, dijo a la ABC que la crisis de la vivienda había sido ignorada en gran medida por el presupuesto federal.
"Es francamente muy decepcionante y un poco patético", dijo Pisarski.
"En su presupuesto el Gobierno no agrega una sola casa al grupo de viviendas sociales en toda Australia".
Si bien el tema de la vivienda social se ha considerado durante mucho tiempo como un problema estatal, Pisarski dijo que la escala de la crisis significa que el Gobierno federal tiene que intervenir con una iniciativa, ya que en la actualidad se necesitan al menos 400.000 nuevas viviendas sociales en Australia.
En su presupuesto el Gobierno no agrega una sola casa al grupo de viviendas sociales en toda Australia, dijo Pisarski.
"Siempre esperamos que el Gobierno federal muestre liderazgo y diseñe una estrategia nacional para la vivienda, un plan que establezca una serie de incentivos para fomentar la inversión en la vivienda social y asequible.
"No esperamos que lo hagan todo, pero sí esperamos que lideren", dijo Pisarski.
Pero el intento del Gobierno para abordar la asequibilidad de la crisis de la vivienda se ve reflejado en el anuncio de su plan denominado Garantía de Vivienda Familiar destinado a ayudar a las familias de bajos ingresos a comprar su primera vivienda.
Según el plan, un progenitor soltero podrá comprar una vivienda con un depósito del 2 por ciento, y el Gobierno garantizará otro 18 por ciento del valor del préstamo.
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Aunque contentos con el anuncio, muchas familias de bajos ingresos han comenzado a cuestionar si los bancos le otorgarían un préstamo hipotecario a una madre o padre soltero con tres trabajos, por ejemplo, incluso si el Gobierno cubre parte del depósito.
El presupuesto federal también incluye un anuncio que favorece al First Home Super Saver Scheme.
En la actualidad dicho esquema permite a cualquier persona que desee ahorrar un depósito para su primera vivienda hacer contribuciones voluntarias a su fondo de jubilación, que no excedan los $ 15,000 al año, para así aprovechar los beneficios fiscales que el Gobierno aplica a la superannuation.
El máximo ahorro bajo el esquema era $ 30,000, pero ahora el Gobierno ha subido el limite a $ 50, 000.
