Sinopsis:
A medida que millones de australianos se preparan para celebrar las fiestas decembrinas y de fin de año, el número de infecciones por COVID-19 aumentan en el país en cifras récord.
Este martes, Nueva Gales del Sur registró 3.057 nuevos casos de COVID-19, Victoria 1.245, Queensland 86 y Australia del Sur 154, por lo que el gabinete nacional sostendrá una reunión de emergencia el miércoles.
Se espera que el Gabinete Nacional discuta este repunte en el número de infecciones de COVID-19 en Australia, y qué políticas implementar para dar frente a la situación.
Estadísticas del COVID-19 en Australia para el 21 de diciembre de 2021:
- Victoria registró 1.245 casos de COVID-19 de transmisión comunitaria y seis muertes.
- NSW registró 3.057 nuevos casos comunitarios y dos muertes.
- Australia del Sur registró 154 nuevos casos.
- Queensland registró 86 nuevos casos.
- El Territorio Capital Australiano (ACT, siglas en inglés) registró 16 casos, el Territorio del Norte 14 y Tasmania cuatro.
Sin embargo, el primer ministro Scott Morrison ha dicho que será una "reunión informal" y ha rechazado un retorno a las políticas de cierres, confinamientos y restricciones.
"He convocado la reunión con el propósito de simplemente darles a todos una actualización sobre la información más reciente que tenemos y compartir la información que tienen los estados y territorios. Será una reunión informal para que todos los Premieres y ministros se pongan al día. No es extraño que nos reunamos un poco más regularmente en vista de la situación con ómicron. La última vez que nos reunimos tomamos algunas decisiones y esta es una buena oportunidad para actualizarnos antes de Navidad".
Morrison ha dicho que, en vista de las altas tasas de vacunación en Australia, el plan es mantener al país abierto de manera segura, para que la economía continúe creciendo tras meses de confinamientos.
Por su parte, el premier de Nueva Gales del Sur, Dominic Perrottet se ha mostrado reacio a la idea de reintroducir algunas restricciones, como el uso obligatorio de tapabocas o mascarillas, diciendo que la salud es cuestión de "responsabilidad personal".
Esto, a pesar de que hoy en el estado se registraron más de tres mil nuevos casos de COVID y dos fallecimientos.
"Como he dicho desde el principio, siempre adaptaremos nuestra respuesta a las circunstancias. Cuando se trata del uso de mascarillas, recomendamos su uso en áreas de las que no se puede mantener una distancia física. Es el momento de que todos nos responsabilicemos de manera personal. Estamos tratando a la gente de nuestro estado como adultos."
Sin embargo, un coro de expertos en salud pública alerta que, si no se restablecen algunas restricciones, los casos de COVID-19 explotarán en enero, y podrán en jaque a los servicios públicos.
El profesor de epidemiología de la Universidad de Nueva Gales del Sur, John Kaldor, dijo a ABC que el gobierno estatal no está actuando con la suficiente rapidez para prevenir una probable sobrecarga de los sistemas hospitalarios.
"Si permitimos que el número de casos aumente a decenas de miles, que sin duda es lo que veremos si no imponemos restricciones claras, si llegamos a esos números y si la gravedad de la enfermedad es incluso la mitad de la Delta, habrá un impacto realmente fuerte en los hospitales y su capacidad para brindar atención a las personas que la necesitan".
Sin embargo, Perottet insiste en que la respuesta de su gobierno es apropiada.
"Estamos adoptando una respuesta equilibrada y proporcionada que se centra completamente en mantener a las personas seguras y, al mismo tiempo, abrir nuestra economía y garantizar que las personas puedan trabajar, tener un empleo y mantener a sus familias. Siempre habrá nuevas variantes de este virus. La pandemia no va a desaparecer y tenemos que aprender a convivir con ella, y como Premier aprecio que haya preocupación en la comunidad".
El experto en sanidad pública y bioética de la Universidad de Sydney, el Dr. Diego Silva, dijo a SBS Spanish que, si bien había aspectos de la salud que sí representan decisiones individuales, esto difiere cuando se trata de la salud pública, ya que, en este contexto, las decisiones de cada persona pueden repercutir en la salud de toda la comunidad.
En ese sentido, el Dr. Silva considera que se debe volver a implementar el uso de los códigos de registros QR y los tapabocas en los espacios bajo techo en Nueva Gales del Sur, ya que éstas son medidas poco intrusivas pero efectivas a la hora de controlar el número de infecciones.
“Aún tenemos tiempo para controlar la situación, pero no mucho tiempo,” afirmó.
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