Sinopsis:
Más de 12 millones de chilenos participaron en la elección de los miembros del consejo que redactará una nueva propuesta de Constitución para reemplazar a la heredada de la dictadura de Augusto Pinochet desde hace 42 años, en medio de una gran apatía y tras el rechazo de un primer texto en septiembre.
Los comicios definieron a los 51 consejeros que elaborarán la propuesta de Nueva Constitución para Chile. Se trata de 25 hombres y 25 mujeres, además del representante indígena.
La jornada estuvo marcada por el apabullante triunfo en la derecha de Republicanos, el partido del ex candidato presidencial José Antonio Kast, que siempre se opuso al cambio constitucional. Este sector se impuso con un 35 por ciento de las preferencias en 15 de las 16 regiones del país y consiguió 22 consejeros, por tanto, tendría poder de veto y presionar por la búsqueda de consensos.
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A diferencia del primer proceso constituyente chileno, cuando los redactores del texto partieron de una hoja en blanco, los 50 consejeros trabajarán sobre un anteproyecto constitucional elaborado por 24 expertos designados por los partidos políticos.
Los expertos trabajaron enmarcados en 12 bases constitucionales como que Chile es un Estado unitario, el respeto de derechos como a la vida, la propiedad y la igualdad ante la ley.
El avance conservador chileno se incrementa si se suma la votación que obtuvo la derecha tradicional, de un 21 por ciento, y 11 consejeros. Por su parte, la coalición de izquierda que apoya al presidente izquierdista Gabriel Boric alcanzó apenas el 29 por ciento de los apoyos y logró tan solo 17 representantes.
Por tanto, el gran derrotado fue el gobierno de Boric, quien llamó a los conservadores a no cometer sus errores, en alusión al control que la izquierda tuvo en la anterior convención, en la que marginó a la derecha política que estaba en el poder.
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También este proceso marcó un fuerte incremento en cuanto a los votos nulos y blancos que representan la quinta parte de la elección. De hecho, casi 17 por ciento hizo una marca en la papeleta que fue considerada inválida. Y los que no marcaron llegaron a más del 4 por ciento.
El escenario para el oficialismo chileno al interior del Consejo Constitucional es uno de los más incómodos, no sólo por la inferioridad numérica de 17 escaños, sino porque será una necesidad casi vital llegar a acuerdos y dialogar por las normas.
Además, quedaron fuera del Consejo Constitucional los partidos tradicionales de la izquierda chilena, como el Partido Radical, la Democracia Cristiana o el Partido por la Democracia, que dominaron la escena política tras el retorno a la democracia después de la dictadura de Augusto Pinochet entre 1973 y 1990
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