Se aproxima un fenómeno de El Niño de moderada intensidad que se podría “potenciar” para Australia

drought.jpg

A medida que el este de Australia se recupera de las recientes inundaciones catastróficas y otros en la región de Kimberley, en Australia Occidental, siguen sufriendo los impactos de las fuertes lluvias, los australianos podría esperar un cambio en el clima en los próximos meses con la llegada de El Niño. El meteorólogo Max Henríquez Daza explica a la audiencia de SBS Spanish todo sobre este fenómeno climático.


Puntos destacados:
  • El Niño es un fenómeno climático natural generalmente asociado con un aumento de las temperaturas, una sequía creciente en algunas partes del mundo y fuertes lluvias en otras.
  • En Australia, Indonesia y zonas del sur de Asia puede causar sequías.
  • El meteorólogo de la Universidad de Ciencias Naturales de Budapest-Hungría, Max Henríquez Daza, afirma que el fenómeno de El Niño que se avecina se puede “potenciar” para Australia.
Lluvias reducidas, temperaturas más cálidas de lo normal, olas de calor y mayor peligro de incendios son algunas de las características que normalmente se asocian con El Niño, un fenómeno natural que se pronostica podría ocurrir en los próximos meses.

Max Henríquez Daza, meteorólogo de la Universidad de Ciencias Naturales de Budapest-Hungría y ex colaborador de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) afirma que particularmente para Australia, el fenómeno de El Niño que se aproxima puede ser de moderada intensidad y podría durar lo que resta de este año, con posibilidad de extenderse hasta el 2024.

“Según los modelos estadísticos, el fenómeno de El Niño que va a comenzar posiblemente en junio, va a ser un fenómeno débil… Los modelos dinámicos nos están indicando que puede haber un fenómeno de El Niño de moderada intensidad y que estaría durando hasta finales del 2023. En el 2024 posiblemente continúe el calentamiento unos meses más”, explica en entrevista con SBS Spanish el también profesor y conferencista sobre temas de medio ambiente, desastres naturales, clima y cambio climático.
Max Henríquez Daza, Meteorólogo de la Universidad de Ciencias Naturales de Budapest-Hungría, fue presentador de los informes del tiempo y del clima en medios de comunicación de Colombia.
Max Henríquez Daza, Meteorólogo de la Universidad de Ciencias Naturales de Budapest-Hungría, fue presentador de los informes del tiempo y del clima en medios de comunicación de Colombia. Credit: Supplied
La Organización Meteorológica Mundial estima que hay un 60 por ciento de posibilidades de que El Niño se desarrolle de aquí a finales de julio, y un 80 por ciento de posibilidades que esto ocurra de aquí a fines de septiembre.

El Niño es un fenómeno climático natural generalmente asociado a un aumento de las temperaturas, una sequía creciente en algunas partes del mundo y fuertes lluvias en otras.

Por ahora, no es posible predecir la intensidad o la duración de El Niño que se está formando. El último que se produjo se consideró bajo, pero el anterior, entre 2014 y 2016, fue intenso y tuvo consecuencias desastrosas.
El impacto de El Niño en las temperaturas se nota normalmente al año siguiente del fenómeno meteorológico. Por ello, la OMM teme que su efecto se vea probablemente en 2024.

El meteorólogo Max Henríquez afirma que históricamente después de salir de un fenómeno extenso de La Niña, como el que acabamos de vivir, el cual duró dos años y siete meses, se presenta El Niño, donde se espera que se calienten las aguas del océano Pacífico y esto afecte las temperaturas.

“Después de que se presente el fenómeno de El Niño, el océano va a continuar relativamente estable, neutral. Eso significa que no va a haber ni Niño, ni Niña en unos 4 años aproximadamente. Eso es importante, porque podemos tener una relativa estabilidad”.
Sin embargo, el especialista puntualiza que esto no quiere decir que a nivel general no vaya a presentarse eventualmente alguna sequía temporal de uno o dos meses. Pero en general, el comportamiento climático va a tener una variabilidad relativamente normal después de que termine el fenómeno de El Niño.

El Niño que se avecina se puede “potenciar” para Australia

De acuerdo con los expertos, no hay dos El Niño idénticos y sus efectos dependen en parte del periodo del año en que se producen.

El fenómeno tiene lugar cada dos a siete años de media y normalmente dura entre nueve y doce meses.

También está asociado al calentamiento de las temperaturas de la superficie del océano en el centro y este del océano Pacífico tropical.
El Niño provoca un aumento de las precipitaciones en ciertas partes meridionales de América del Sur, de Estados Unidos, del Cuerno de África y Asia central.

En Australia, Indonesia y zonas del sur de Asia, puede causar graves sequías.

En este sentido, el meteorólogo Henríquez Daza señala que las proyecciones del Buró de Meteorología de Australia indican que el fenómeno de El Niño que se avecina se puede “potenciar” un poco para esta región.

En Australia las anomalías de El Niño coinciden con las anomalías del dipolo del océano Índico, y esta superposición de efectos puede determinar un comportamiento climático para Australia muy especial, se pueden potenciar las consecuencias que tiene estos fenómenos.
Max Henríquez Daza, meteorólogo y conferencista sobre temas de medio ambiente, desastres naturales y cambio climático.
“Este es un Niño que podría tener un impacto un poco más severo que en otros lados; porque acordémonos que el fenómeno de El Niño tiene un efecto de sequía. Hay déficit de lluvias que generalmente se presentan durante unos 6 meses, aproximadamente”, explica el autor del libro Los Desastres de Origen Natural.

Henríquez Daza agrega que el impacto de El Niño no es igual en todos los países. “Por ejemplo, en el desierto de Atacama -uno de los más secos del mundo- cuando hay fenómeno de El Niño, cuando se calientan las aguas del Pacífico, allí frente a la costa sudamericana llueve en abundancia, en la costa de Perú, de Ecuador e incluso hasta el norte de Chile y el sur de Colombia.

“Son lluvias superiores a lo normal. Pero en el resto de esos países, en las zonas andinas, allí hay sequías, sequías que son de alto impacto tanto en Perú como en Ecuador y en Colombia, en particular.

“Al otro lado de la cuenca del Pacífico, en Australia, sucede algo parecido. Porque en la zona costera de Australia Oriental, que habitualmente es de aguas cálidas se torna en aguas frías y eso hace que disminuyan las precipitaciones”, explica el especialista.
Max Henríquez Daza ha sido colaborador de la Organización Meteorológica Mundial en proyectos sobre difusión de los informes en los medios de comunicación en Centro América y el Caribe.
Max Henríquez Daza ha sido colaborador de la Organización Meteorológica Mundial en proyectos sobre difusión de los informes en los medios de comunicación en Centro América y el Caribe. Credit: Supplied
El meteorólogo colombiano aclara que tanto La Niña, como El Niño, son parte de la variabilidad natural del planeta, por lo tanto tenemos que aprender a convivir con estos fenómenos naturales.

“El clima ha sido así toda la vida. Lo que pasa es que la ciencia, desde hace unos 30 años, descubrió el gran impacto que tienen los fenómenos del Pacífico sobre el clima mundial, más en unos países que en otros. Por ejemplo, en Australia hay un efecto importante; lo mismo que en Ecuador, Perú y Colombia, porque están colindando con las aguas del Pacífico, donde se presenta el fenómeno de El Niño y La Niña, pero esto ha sido de toda la vida”.

Sin embargo, Henríquez Daza sentencia que con el cambio climático se espera que estos fenómenos se exacerben un poco.
Presiona en el ícono de reproducción debajo del titular de este artículo para escuchar la entrevista completa.

Share